Recta final de los F1 Test Days en el Circuit de Barcelona-Catalunya con una sesión matinal que ha vuelto a confirmar las buenas sensaciones de Ferrari. Este viernes, Kimi Räikkönen ha liderado la tabla de tiempos, con un impresionante 1:17.221, a escasas cuatro centésimas del 1:17.182 marcado ayer por su compañero Sebastian Vettel.
La mañana está deparando nuevas sorpresas en el trazado catalán. Mientras la Scuderia sigue marcando el ritmo con los compuestos hyperblandos y Mercedes –con Lewis Hamilton al volante- repite su estrategia de acumular kilómetros sin parar, otras escuderías apenas han podido rodar por diversos problemas técnicos. Es el caso de McLaren, Renault y Sauber.
Así, Fernando Alonso sólo llevaba 7 vueltas antes del mediodía porque una fuga de aceite en el motor de su McLaren ha obligado a cambiar el motor. Menos activo todavía se está mostrando su compatriota Carlos Sainz. Tras completar apenas 4 giros, el madrileño de Renault ha tenido que regresar a boxes, donde sus mecánicos trabajaban sin descanso para solucionar un problema en la caja de cambios de su monoplaza. El objetivo de ambas escuderías es reparar a tiempo para poder regresar a pista por la tarde y no desaprovechar así la última jornada de pretemporada.
Durante la sesión matinal, los comisarios se han visto obligados a mostrar bandera roja por la pérdida de aceite en pista del McLaren e, instantes más tarde, por una salida de pista del Sauber pilotado por Pierrer Leclerc, otro de los menos activos de la jornada.
De este último test también llama la atención las buenas sensaciones mostradas por Romain Grosjean con su Haas. El francés figura segundo en la tabla de tiempos provisional, con 1:18.590, marcado con gomas superblandas. Además, lleva completadas más de 70 vueltas sin ningún contratiempo. Sólo han acumulado más, por el momento, Lewis Hamilton (Mercedes) y Brendon Hartley (Toro Rosso), que ya acarician el centenar de giros.
Esta tarde se consumirán las últimas cinco horas de pretemporada en el Circuit de Barcelona-Catalunya y, con ellas, el escaso margen que tienen los equipos para poner a punto sus monoplazas antes del esperado arranque del campeonato.